"ESTA HISTORIA NO TIENE NADA DE
FANTÁSTICA..."
por Ricardo Luis Acebal
...dice el autor en la "Introducción", página 15 y continúa: ... "aunque sí, reconozco, algunos pasajes
bastante increíbles. Lamento decir que quienes esperaban lo contrario que aquí
no veremos ningún ser sobrenatural, pese a que en su momento se especulaba con
ciertos espíritus malignos –los súcubos medievales- que regresaban al final del
milenio. Tampoco se tratará sobre hechos adjudicables a cierta secta
sangrienta, tal como explicaba otra de las absurdas hipótesis de la época, muy difundida en los diarios."
El "hombre gato" del libro de Ranieri no tiene nada que ver con el
mendocino que fue noticia entre 2019 y 2023 ni tampoco con la cumbia de Riki
Maravilla y otras variables más recientes.
Sobre todo los que en los años 1983 y 1984 habitábamos el Partido de
Almirante Brown (Gran Buenos Aires al Sur) como vecinos de Adrogué, José
Mármol, Temperley y también Burzaco podemos dar fe de que ese hombre-gato que
se aparecía durante las noches a partir del 31 de agosto de 1984 fue motivo de
noticias destacadas en diarios y radios -sobre todo "sensacionalistas"- de
aquellos tiempos.
En la Argentina de 1984 no era "popular" la internet. Su comercialización
al público en general recién comienza en 1995. Por lo tanto para impactar y/o
meter miedo en la población no se podía recurrir a las actuales falsas noticias
con imágenes truchadas gracias a la "inteligencia artificial", para que quienes
viven esclavizados por el celular multipliquen por miles (o millones) la "gran
noticia" a lo largo y ancho del mundo en dos minutos.
La Argentina de 1984 era presidida por Raúl Alfonsín. Una de sus promesas
electorales había sido juzgar a las juntas militares, que dejaron el gobierno
(pero no el poder) en 1983, después de destrozar la Nación Argentina desde
1976.
La acción de grupos clandestinos favorables a la dictadura militar (civiles
y fuerzas militares y de seguridad en actividad) continuó activa durante los
primeros años de la reinstalada democracia. En 1984 estaba por iniciarse el
"Juicio a las Juntas" y ante su inminencia comenzaron las amenazas telefónicas
anónimas de bombas a explotar en las sedes de instituciones culturales y
domicilios particulares en varios puntos de nuestro país. Por ejemplo el
interior de escuelas de Almirante Brown, como el Colegio Nacional de Adrogué.

Diario "Tribuna" Adrogué, 7 de septiembre de 1984
A fin de hacer memoria acerca de qué personajes fueron funcionarios
oficiales entre 1976 y 1983 en Almirante Brown (por ejemplo el nefasto
comisario Miguel Osvaldo Etchecolatz, el "señor" Juan Antonio Del Cerro, alias
"capitán colores", etc.) propongo ver en esta misma sección Libros de Identidad
Cultural la nota "NO AL OLVIDO EN EL PARTIDO DE ALMIRANTE BROWN".
Creí necesaria hacer esta introducción a fin de invitarlo a apagar
celulares (al menos durante un par de horas) lo mismo que otros instrumentos
intoxicantes como son varios programas radiales y la casi totalidad de los
televisivos "de actualidad" y así poder apreciar la calidad de este trabajo de
Ranieri.
Coincido plenamente con la opinión de la prologuista Laura Arredondo: Ranieri pone en juego el suspenso, el amor,
la provocación, el humor en este texto. Sus personajes se mueven en la
cercanía, junto a un grado notable de intimidad repleta de murmullos:
colisionan, conspiran, rivalizan... La novela avanza a lo largo de diálogos
implacables, noches de complicidad y compañerismo que la enmarcan en una
dinámica cinematográfica.
Y junto con mi felicitación al ilustrador Gerardo Canelo, paso a darle
datos como para que pueda adquirir un ejemplar de "Los días del Hombre Gato".