TRABAJADORA DE LA CULTURA
Angeles Crovetto
es oriunda del partido de La Matanza. Egresó de la Universidad Nacional
del Arte con el título de Licenciada en Artes Visuales con Orientación en
Escultura, pero su formación artística comenzó desde muy pequeña en escuelas
estatales de artes para niños y talleres particulares.
"Vengo
de una familia de artistas, no precisamente mis viejos, sino mis abuelos, tíos
y bisabuelos tenían una tradición artística en música y artes plásticas. Fue un
lenguaje adoptado de manera natural por mí y por supuesto con el estímulo y
contexto familiar. De chiquita iba a talleres de arte, canto y pintura, así que
el mundo de las artes me es esencial desde siempre. No hay un momento donde yo
pueda decir que me surge el interés".
¿Cómo preferís que te llamen "artista", "militante", "trabajadora"?
¿por qué?
Es
complicado. Si bien me acostumbré a que me lo digan, a tomarlo de la mejor
manera posible, es complicado. Tiene mucha carga semántica la palabra artista,
es casi una etiqueta que es necesaria para los otros, decirle al otro
"artista". También fue utilizada por los artistas para tomar cierta distancia
de lo usual, de lo cotidiano, quizás por eso no me es muy amigable aunque trato
de tomármelo de la mejor manera, porque es lo que se usa, pero arrastra ese
concepto de "genio creador" por fuera, que lo hace "especial", por lo que no me
hallo en ese término. Sí en trabajadora de la cultura, porque más allá que sea
algo natural en mí, yo digo que soy una trabajadora. No soy una trabajadora
alienada en términos conceptuales, pero si es un trabajo y militante claro que
sí. El compromiso te hace militante, de cómo entendés el mundo, la vida, la
muerte de una manera más o menos explícita. Yo lo asumo explícitamente así que
soy una trabajadora de la cultura, una militante cultural.
(Alan Almada
en "La descamisada"
Ángeles Crovetto (Foto: Ricardo Acebal).