Luego de más de diez años de solicitar un apoyo económico para el mantenimiento de este sitio a Organismos del Estado, tanto Nacional como Provincial y Municipal e incluso a la actividad privada y no teniendo respuesta alguna, recurrimos a la solidaridad de nuestras lectoras y lectores.
Si usted desea colaborar a voluntad (todo aporte, por mínimo que parezca, es útil) puede hacerlo a: CBU: 01401055 03504256471340 - Cuenta nº: 564713/4
Banco de la Provincia de Buenos Aires. MUCHAS GRACIAS
Te cuento costumbres
LA SEÑALADA EN EL SUR ARGENTINO
Durante los tiempos de la conquista los
españoles introdujeron en esta América el caballo, lo cual produjo una serie de
cambios en los hábitos en los antiguos guerreros. Según cuentan, los
descendientes de Calfucurá dejaron sus lanzas para convertirse en crianceros y
pastores de ganado caprino y ovino. El nomadismo dio paso a la transhumancia
con campos de invernada y veranada. En los valles, protegidos de las
inclemencias del tiempo y al reparo del viento y las nevadas, se mantiene el
ganado durante los meses de mayo y octubre, para luego, trasladarlo a zonas más
altas y con mejores pastos. En algunas comunidades de Río Negro, Chubut y
Neuquén se realiza una tarea que llega a ser una fiesta, la señalada. Para
llevar a cabo ésta tarea se reúne los animales, y muy temprano, al amanecer del
día en que se van a realizar los trabajos, el pueblo hace una rogativa o
Nguellitún, en lengua mapuche. En ella le piden Nguenechén, la deidad de la
cosmogonía Mapuche, fertilidad para el ganado. Para realizar el Catripillín,
corte de orejas, se invita a los vecinos para que participen en la fiesta y
como testigos de no haber señalado lo ajeno. Esta reunión de paisanos dura todo
el día y con la culminación del trabajo y la satisfacción de la tarea cumplida,
se come asado, para más tarde romancear y bailar.
Audio de la nota: "De señalada" -ranchera- Letra de Marcelo Berbel-Música de Roque Martínez.